Miami +

Palm Beach

USD 20,00

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Miami es diversión, cultura, barrios vibrantes y noches sexies.

Lejos quedó la época de Miami como destino exclusivamente de Shopping y playa. Hoy en día es balneario y es ciudad cosmopolita, un crisol de culturas y epicentro de actividades artísticas, de diseño, financieras o corporativas de primera línea.

Especialmente la primera semana de cada diciembre cuando se instala Art Basel y todo el universo de ferias y eventos que toman la ciudad, la vibra en cada barrio es especial, seductora y estimulante.

Las calles ven pasar a las modelos y hípsters usuales a los que se suman creativos, empresarios, artistas, y público vinculado a industrias creativas.

Desde coleccionistas particulares de arte que abren sus warehouses para disfrute general, museos firmados por estudios internacionales, edificios y arquitectura de autor, barrios como Wynwood o el Design District que se expanden cada año, la ciudad se consolida con una oferta de alto valor agregado y como puerta de entrada al mercado americano por excelencia, como hub de negocios, creatividad y tecnología.

La escena gastronómica se alinea con ese crecimiento cualitativo y surgen propuestas innovadoras generadas por inmigrantes que fusionan técnicas y sabores para deleite de comensales exigentes.

Por su parte, la hotelería que rescata la herencia colonial o Art Déco que supo tener su auge en el siglo pasado, propone nuevos formatos centrados en la experiencia personalizada del viajero, más alejada de cadenas internacionales, con opciones boutique y sofisticadas.

Miami ya no es solo playa y compras. Es un concierto al aire libre proyectado en los muros del edificio de la orquesta sinfónica, una instalación artística interactiva en el Design District, descubrir obras de arte de gran escala en un depósito particular, un brunch en un hotel que congrega el tout Miami, una exhibición con instalación de carpas en la playa con livings y música lounge para descansar, una cita by appointment con una curadora de arte o una diseñadora canadiense, o terminar la tarde en un rooftop disfrutando la suave brisa del océano